martes, 26 de junio de 2012

¡Una caña, por favor!

Esta vez me he retrasado con el post, pero la “perlita” de noticia que he hallado vale mucho la pena. Para las amantes de la cervecita (más aun ahora, con la ola de calor que tenemos) que se queden embarazadas, aunque ya lo sospechábamos, un grupo de investigación en Dinamarca nos lo ha confirmado: tomar alcohol moderadamente no afecta al desarrollo del feto ni al futuro niño/a.




Este estudio se realizó con 1600 danesas, por lo que parece que los resultados del estudio son fuertes y consistentes. Los hijos de las  mujeres sujetos del estudio que consumieron entre 1 y 9 unidades de alcohol a la semana no presentaron ninguna diferencia en inteligencia, desarrollo y otras características con los de las madres abstemias. Para entendernos, una unidad de alcohol correspondería a un vasito pequeño de vino, o una caña de cerveza. En el caso de mujeres que consumieron más de 9 unidades de alcohol a la semana, sí empezó a observarse una asociación con niveles menores de atención en sus hijos.


Pero en resumen, esto es una buena noticia para las mujeres embarazadas, que ya podrán tomarse una cervecita o un vino de vez en cuando sin causar perjuicio a su bebé, sin sentirse culpables, y sin escuchar sermones por parte de los demás. Y seguro que esto contribuye a hacer el embarazo más placentero y quizás incluso más sano, dada la cantidad de nutrientes y antioxidantes que presentan el vino y la cerveza.

Para la gente friki como yo, que les gusta ver los estudios originales, pínchese aquí o aquí para más datos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario